sábado, enero 31, 2009

nyc - oct - 08 "tras las huellas de Camilo Egas, un hombre secreto"










estas fotos son un documento expontáneo
de un trabajo por encargo.

el encargo de un amigo se convirtió en la aventura de un viaje y en algo propio
que me reveló el tipo de verdades que a veces no queremos aceptar
ahora soy parte de una historia y el tratar de armar el rompecabezas
terminó desarmando la mia


¿cada vez que creamos lo hacemos para dejar algo de nosotros mismos en el tiempo?
¿para qué creamos, para nosotros, para ellos o para los que todavía están por venir?
¿será cierto que solo fuimos y estuvimos cuando alguien nos recuerda?
¿será como las palabras, están cuando alguién las usa?

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al regreso del viaje,
me robaron mis maletas, mi ropa, mis cosas y mis memorias escritas,
por arrebato del instinto se salvaron las imágenes, las digitales y esas que se quedan en el alma
y no te las pueden quitar


cuatro años después regresé a nueva york
para seguir los pasos de Cámilo Egas, un ecuatoriano del que poco se conoce.

al paso, con una cámara que cabe en la palma de mi mano
trato de seguir un guión y creer en una historia de vida
que se repite y se pasa en el tiempo
como un estigma generacional



no imaginé vivir 12 días en el corazón de chinatown
mott y canal street
tres personas, una cama, dos colchonetas, dos bolsas de dormir y un gato llamado "sola"


el espacio era mínimo y recargado
una ceramista de origen chino era la dueña de este pequeño apartamento
en el que no cabía nada más


sin embargo dos días después llegué a sentir a este sitio como mi hogar
y a este barrio como mio
nos adaptamos a todo


es imposible no sentirse ajeno a un espacio repleto de elementos que corresponden a su dueño